Es un canto muy indicado para cantar con los niños en la Eucaristía.
Es un canto de ofertorio y/o Comunión.
TOMA SEÑOR MI NIÑEZ
Toma Señor, mi corazón,
toma Señor lo que soy yo.
Yo tengo fe y creo en ti,
hoy vengo a ponerme en tus manos,
toma Señor mi pequeñez.
Toma Señor hoy mi niñez
quiero que Tú vayas donde voy,
seré feliz y cantaré,
te prometo ser mejor. (bis)